El subsidio para el pago de agua potable es un beneficio estatal crucial destinado a las familias más vulnerables de Chile, tanto en zonas urbanas como rurales.
Este subsidio representa un financiamiento parcial del Estado para el pago mensual de un consumo máximo de 15 metros cúbicos de agua potable y alcantarillado.
Las personas o familias que destinan el 5% o más de sus ingresos mensuales para el pago del servicio de agua potable y alcantarillado son los beneficiarios de este subsidio. Dependiendo de su situación de vulnerabilidad, algunos hogares pueden acceder al 100% de financiamiento del subsidio, pero solo para los primeros 15 metros cúbicos mensuales de agua potable.
¿Quiénes pueden ser beneficiarios del subsidio al pago del agua potable?
Para ser elegible para este subsidio, el Estado exige el cumplimiento de ciertos requisitos:
1. Estar inscrito en el Registro Social de Hogares (RSH).
2. Ser residente permanente de un domicilio que corresponda con la municipalidad que concede este beneficio.
3. Estar al día en los pagos con la empresa de servicios sanitarios o con los sistemas de agua potable rural, según corresponda.
4. La persona que postula debe ser la jefa o el jefe de hogar de la familia, de acuerdo a lo señalado en el RSH.
5. Se accederá al mencionado financiamiento del 100% del servicio cuando la familia sea integrante o participante del Subsistema Chile Seguridades y Oportunidades.
Además, la persona que postula puede ser la propietaria de la vivienda, arrendataria —siempre que no resida en la misma casa con la propietaria—, usufructuaria o allegada externa.
Para postular al subsidio, el jefe de hogar debe acudir a la municipalidad de la comuna en la que reside y presentar la última boleta de agua de la empresa sanitaria o del sistema de agua potable rural, la cual debe estar pagada. Este trámite se puede realizar durante todo el año y las consultas se pueden efectuar en el departamento social del municipio.
El subsidio tiene una vigencia de tres años y puede renovarse —no automáticamente, sino postulando nuevamente— por un periodo de igual duración, siempre que se sigan cumpliendo los requisitos y haya cupos disponibles en la comuna.
Existen también causales de pérdida del subsidio, como dejar de cumplir alguno de los requisitos, no pagar durante tres meses continuados la parte que no está subsidiada por el Estado, cambio de domicilio, cumplimiento del plazo legal (los tres años), o negarse a entregar la información que la municipalidad solicite para la revisión del beneficio.
