Último condenado a pena de muerte en Chile nuevamente solicita libertad condicional

Hugo Gómez Padua fue el último criminal condenado a pena de muerte, por violar y asesinar a una niña de 10 años en 1999, y salvó de la pena capital porque el castigo, al año de dictarse la sentencia, fue eliminado de la legislación en Chile. En 2020 la justicia negó su solicitud de libertad condicional y ahora lo intenta de nuevo.

En días próximos las solicitudes para optar a la libertad condicional de cuatro asesinos y violadores de menores volverán a presentarse en la instancias correspondientes de la justicia chilena.

Todos estos casos recibieron condena por crímenes de violación con homicidio perpetrados en contra de dos niñas, un niño y una adolescente entre 1988 y 2001.

Uno de estos criminales es Hugo Gómez Padua, último condenado a la pena de muerte en Chile, en 1999, por violar, asesinar y descuartizar a Paula López, de 10 años.

Sin embargo, Gómez Padua se salvó de la pena capital porque al año de dictarse la sentencia el castigo fue eliminado de la legislación. En 2020 la justicia negó su petición, pero este año emprende el intento nuevamente.

Los tres aspirantes al beneficio carcelario que restan son Carlos Silva Valenzuela, Luis Miguel Carrasco Tapia y Cristián Andrés Vilos Valenzuela.

De acuerdo con la Fundación Amparo y Justicia, desde 2018 las comisiones respectivas en tribunales han denegado la libertad condicional a estos hombres, al considerar- entre otros argumentos- su peligrosidad para la sociedad.

“Aun cuando la libertad condicional es un beneficio deseable en el marco de la promoción de rehabilitación y reinserción de los condenados, al tratarse de agresores sexuales que han cometido delitos de la magnitud expuesta la obtención de este constituye un riesgo permanente y puede alterar significativamente el bienestar de las víctimas, sus familias y de la comunidad por la alta probabilidad de reincidencia”, señaló mediante un comunicado el abogado Ramón Suárez, presidente de Amparo y Justicia.

“Un ejemplo de este riesgo de reincidencia es el caso de Gómez Padua. En 1976 fue condenado por violación con homicidio de una niña de nueve años en Colombia y, precisamente, gozaba de libertad condicional en su país cuando quebrantó el beneficio y entró irregularmente a Chile en 1995. Cuatro años después violó y asesinó a una niña en Santa Cruz. Hoy, nuevamente, postula a la libertad condicional”, argumenta la Fundación.

En representación de las familias de las víctimas, Amparo y Justicia solicitará hacer presentaciones ante las comisiones de libertad condicional en las regiones del Bío Bío, Valparaíso y Metropolitana, para exponer el grado de peligrosidad de estos sujetos.