Han transcurrido tres años desde uno de los eventos más controvertidos en la historia de la televisión chilena, y aún persisten sus repercusiones. José Miguel Viñuela decidió no aceptar el veredicto que lo obligó a pagar una indemnización al camarógrafo a quien cortó en vivo y en directo.
De esta manera, el presentador optó por presentar una apelación a través de sus representantes legales, desafiando la sentencia emitida por el 23° Juzgado Civil de Santiago, que lo obligaba a abonar 17 millones de pesos al profesional audiovisual José Miranda.
De acuerdo con una publicación en LUN, la defensa de Viñuela, compuesta por los destacados abogados Ciro Colombara y Aldo Díaz, ha interpuesto una apelación en la que solicitan“se revoque la resolución recurrida y, en definitiva, se rechace en todas sus partes la demanda interpuesta, o, en subsidio rebaje el monto indemnizatorio”.
No obstante, esta acción podría tener consecuencias desfavorables, ya que el abogado del camarógrafo ha advertido que aprovecharán esta apelación de Viñuela y su equipo para solicitar un aumento en la suma de la indemnización.
La broma le salió cara a Viñuela
Fue en julio de 2020 cuando el entonces conductor del matinal “Mucho Gusto” de Mega, tomó unas tijeras y, de manera inesperada, cortó el cabello de Miranda frente a las cámaras. Este episodio le costó su puesto de trabajo y hasta el día de hoy lamenta las repercusiones.
En su fallo, el Juzgado determinó que “el demandado, de manera imprudente, y por ende negligente, cortó el cabello del demandante, atribuyéndolo a una humorada”. Agregó que el conductor “debió respetar la dignidad de la persona con quien trataba, sin que el tinte humorístico de su forma de conducirse en la televisión justifique lo que hizo”.
