María Luisa Cordero es una médica cirujana y política chilena. Hace tiempo, dio un diagnóstico más que acertado al ministro de Economía Nicolás Grau. Con tan solo verlo logró comprender lo que le estaba pasando. Y para sorpresa, lo volvió a hacer. De esta manera queda en claro que no fue una simple cuestión de suerte.
María Luisa Cordero le dio su diagnóstico al ministro de Educación, Marco Antonio Ávila y le planteó su duda. “Yo me acerqué a hablar con el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, y le dije ‘sabe una cosa, yo lo había visto a usted recién asumido el cargo y no era tan negro. Lo noto muy café. ¿No tendrá algo al hígado?’”, comentó la diputada.

Un mes más tarde de esa charla, los políticos chilenos volvieron a encontrarse. Y el ministro le confesó que había acertado en su predicción y que tras ser chequeado médicamente, descubrió que algo lo estaba afectando.
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“Cuando vino otra vez, como un mes más tarde, me dijo que le habían encontrado alteraciones en sus pruebas hepáticas”.
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Hay que recordar que la doctora le dijo en su pasado, cuando hizo a referencia a Nicolás Grau, pocos días después él presentó licencia porque sufría una trombosis pulmonar de bajo riesgo. “Es un respirador bucal, así que tiene baja saturación de oxígeno, se acuesta chileno y se despierta boliviano”, había expresado en aquel entonces Doctora Cordero.
“¿Por qué se molestan cuando yo hago diagnósticos? Al ministro de Educación yo le dije ‘usted se ha puesto cada día más café, me tinca que tiene una hiperpigmentación por tener alta la bilirrubina”, finalizó la diputada para “Publimetro”.
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