Cada 15 minutos mueren y resultan heridos niños palestinos desde el estallido de la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás el pasado 7 de octubre, una situación que según Unicef ha convertido a Gaza en un verdadero cementerio de menores de edad.
“Gaza se ha convertido en un cementerio de niños y es un infierno sobre la tierra para todos los demás” dijo este domingo el portavoz de la agencia de la ONU para la infancia, James Elder, que resaltó que el número de niños muertos “lamentablemente, aumenta significativamente cada día”.
Las imágenes captadas por teléfonos móviles y periodistas locales, y difundidas en las redes sociales, dan cuenta de decenas de cadáveres de niños y de niños muy malheridos. “El tiempo está costando vidas. Llamamos a un alto el fuego inmediato. No hay un lugar seguro en Gaza”, escribió por su parte la ONG Save the Children en la red social X (ex Twitter).
Los datos de Unicef sobre bombardeos israelíes en Gaza
El Ministerio de Salud gazatí publicó que al menos 4.000 menores de edad han muerto, 8.067 han resultados heridos y 1.250 se encuentran presuntamente desaparecidos bajo de los escombros de edificios destruidos por los continuos ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel.
El pasado 17 de octubre, Save the Children aseguró que “según los últimos datos disponibles, más de 1.000 niños y niñas han muerto en 11 días de ataques aéreos en la Franja de Gaza, lo que equivale a uno cada 15 minutos”. Un claro indicador de que la ofensiva afecta sin piedad a cada vez más infantes.
“La situación claramente no mejora. Unos 420 niños mueren o resultan heridos cada día, un número obviamente horrible”, dijo a EFE Toby Fricker, también de Unicef. Fricker aseguró que hay muchas cifras de víctimas circulando, “pero la realidad es que hay demasiados niños que mueren o resultan heridos diariamente”.
El portavoz de este organismo insistió en que las partes en conflicto deben proteger a los niños y a los civiles durante las hostilidades. “En estos momentos, no hay ningún lugar seguro para los niños en Gaza”, sentenció Fricker. “Ahora que muchos han sido desplazados, (los niños) viven en refugios en colegios y otros lugares y hay una falta de acceso a servicios esenciales como agua potable, servicios de salud o higiene”, agregó.
