Alfredo Aliaga Burdio, un español de 92 años, consiguió el récord Guinness al convertirse en la persona de mayor edad en cruzar a pie el Gran Cañón del Colorado, en Arizona, EEUU.
Su historia es llamativa, porque, tras quedar viudo en 2006, decidió volver a visitar los lugares a los que había ido con su esposa, por lo que invitó a su hija y a su nieto de nueve años a cruzar el Gran Cañón. Años más tarde, en octubre de 2022, Aliaga Burdio volvió a cruzarlo a pie con su hijo, recorrido que hizo en cuatro días. Fue en este viaje que se le ocurrió la idea de buscar el récord.
“Había leído sobre el poseedor del récord anterior, el señor John Jepkema, a quien admiraba inmensamente. Sabía que yo era solo unos meses más joven que Jepkema y pensé que tenía una gran oportunidad de establecer un nuevo récord el año siguiente”, dijo a Guinness World Records y agregó: “Empecé a llevar un estilo de vida saludable a los 76 años”.
El adulto mayor que cruzó el Gran Cañón a pie y quedó en el los récords Guinness
Su entrenamiento comenzó en enero de 2022, con caminatas diarias de 12 kilómetros. La idea original era cruzar el Gran Cañón en mayo de 2022, pero debió postergarlo debido a que los caminos estaban cerrados por la nieve y por los daños provocados por el agua del deshielo.
Finalmente, el 15 de octubre de 2023 comenzó la travesía desde el borde norte a las seis de la mañana, y 20 minutos después se detuvo en el mirador Coconino para ver la salida del sol.
“Estaba muy cansado después de las primeras cinco horas”, contó Aliaga Burdio, quien añadió: “Me sorprendió que después de 15 minutos de descanso, algo de comida y electrolitos, me recuperé y me sentí fuerte de nuevo y listo para afrontar las siguientes siete horas”.
Para poder completar el trayecto, debió caminar de manera lenta pero constante, pero también fue fundamental la cuestión mental. “Pienso en el próximo paso y en el próximo y no en cuán lejos tengo que ir. Entonces no es tan abrumador y es más factible”, expresó.
Finalmente, el recorrido se extendió durante 34 horas y 2 minutos contando las paradas, pero estrictamente de caminata fueron 21 horas y 15 minutos.
Dos testigos
Un importante estímulo que tuvo el hombre de 92 años durante su recorrido fue el apoyo de otras personas que también cruzaban el Gran Cañón y que lo animaron a continuar.
“Realmente lo mejor fue conocer a toda la gente en el camino, ese apoyo, amabilidad y felicidad fue maravilloso”, sostuvo, a la vez que comentó: “¿Puedes creer que dos personas que normalmente cruzarían el Cañón en ocho horas aceptaron ser testigos, caminaron a mi velocidad y fueron inquebrantables en su apoyo?”.
Cumplido el objetivo de convertirse, Aliaga Burdio ya se planteó nuevos récords a quebrar, como escalar el Aconcagua, en Argentina, el Chimborazo o el Cotopaxi, ambos en Ecuador.
