Michelle Obama y Barack Obama son una de las parejas más famosas del mundo. Se casaron en 1992 y se convirtieron en la primera pareja presidencial afrodescendiente en ocupar la Casa Blanca en la historia luego de que él se convirtiera en presidente de Estados Unidos en 2009. Pero no todo es color de rosas y recientemente la ex primera dama reveló por qué por una década no soportó a su esposo.
Hace dos años Michelle confesó en su podcast que atravesaba dificultades con su esposo, el 44° Presidente de Estados Unidos. Sin embargo, esta semana ha sido la propia Michelle Obama quien volvió a hablar sobre el tema, detallando las razones y el momento de ese largo y complicado periodo.
“Hubo 10 años de matrimonio en los que no soportaba a Barack”.
Dijo la ex primera dama durante una entrevista realizada en el canal dedicado a temas de mujeres Revolt TV.
Michelle, se encuentra promocionando su ultimo libro, titulado “The Light We Carry”, donde la ex primera dama habla sobre esto y otros temas sociales.
Si bien su matrimonio ha sido para muchos un referente de amor conyugal alrededor del mundo lo cierto es que cada pareja atraviesa sus crisis y ella lo admitió.
“La gente piensa que soy mala por admitirlo, pero es como si hubiera habido diez años durante los cuales no soportaba a Barack“.
Obama explicó que esa década complicada coincidió con los primeros años de crianza de sus hijas Malia y Sasha, donde intentaban hacer lo mejor para cuidarlas, mientras se preocupaban por la escuela y de quién hacía qué.
“El matrimonio no siempre es el 50-50. A veces es 70-30, a veces es 60-40”, añadió Michelle Obama, recordando también cuando grababa a Barack yendo al gimnasio o jugando al golf.
“Llevamos 30 años casados, ha habido 10 malos, depende de cómo se mire, la gente suele rendirse enseguida”.
Los Obama: una historia de amor verdadera
La pareja tuvo su primer encuentro en un bufete de abogados de Chicago en 1983 y decidieron dar el sí en su boda en 1992. En 1998 y 2001 tuvieron a sus dos hijas Malia y Sasha por lo que confesó:
“Los niños no hablan, no saben comunicarse, tienen exigencias, lloran, pero no puedes culparlos y les quieres más que a nada”.
Lo cierto es que el matrimonio no ha tirado la toalla a pesar de los problemas y supieron sobrellevarlos hasta el día de hoy.
La abogada admitió que cada vez que lo veía decía: “no estoy contenta, pero te respeto. No estoy de acuerdo contigo, pero sigues siendo una persona buena e inteligente… el amor va más allá de las dificultades”.
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